San Javier

Parroquia San Francisco Javier

misionarq_0107_1678824757_5145.jpeg

Antecedentes

El fundador de la Reducción de San Javier fue el sacerdote jesuita José Ordóñez, el día 3 de diciembre de 1629. Su desarrollo fue notable. Pero la orden del rey Carlos III, en el año 1767, de expulsar a los misioneros jesuitas produjo la dispersión de los aborígenes que no toleraron la administración de encomenderos, ávidos de riquezas. Los mamelucos saquearon la reducción y liquidaron todo sueño de progreso. La fe se guardó en el corazón y en el ámbito del grupo familiar que logró refugiarse en la selva. Cuando en 1852 aparece en la zona el famoso “monje”, en el Cerro Palma, fueron muchos los que se acercaron para manifestar públicamente su fe ante las imágenes del Señor de los Desiertos y de la Virgen María.

Refundación

El 2 de octubre de 1877, cien años después de la expulsión de los jesuitas, se vuelve a refundar San Javier, con el mismo patrono. Poco a poco llegaron extranjeros y los lugareños nativos se acercaron en busca de seguridad. En octubre de 1898 se formó la “Hermandad del Cerro Monje”, que se responsabilizaba por la atención de la capilla. En este tiempo el obispo de Paraná, a cuya diócesis pertenecía Misiones, pidió a los Misioneros del Verbo Divino que atendieran espiritualmente el Territorio. En 1903 el P. Gerardo Woeste llegó a San Javier. Venía desde Posadas para predicar una misión, con positivos resultados, de tal manera que cada tanto regresaba para seguir animándolos en la fe.

En el año 1911 llega a San Javier el P. José María Birkel, quien animó a la feligresía para que se construyera una humilde capilla; paredes de tacuaras, barro y techo de paja. “Pobre como Belén, pero aquí también está Dios”, reconocía el misionero. En el año 1917 visitó San Javier el P. José Bayerlein, que en sulky, venía desde Azara.

Sus visitas fueron regulares y se construyó una hermosa capilla de madera. En el año 1929 visitaba periódicamente San Javier el P. Ignacio Katrynski; celebraba la Eucaristía, bautizaba, bendecía matrimonios y visitaba a los enfermos.

La parroquia de San Francisco Javier

A partir de 1930 el pueblo de San Javier y las colonias recostadas sobre las costas del Río Uruguay comenzaron a tomar vida. Esto lo captó el obispo de Corrientes, quien en 1935 elevó la zona al rango de parroquia. Comprendía el terruño entre las Sierras de Misiones y el Río Uruguay. Unos 300 kilómetros de largo por 40 de ancho, donde habitaban unos 10.000 pobladores. El primer párroco fue el P. Miguel Riedel, quien desde 1933 visitaba la zona, primero desde Apóstoles y luego desde Concepción de la Sierra. Una de las dificultades para encontrarse con la gente eran las distancias, falta de caminos, arroyos sin puentes y el Río Uruguay que no era siempre navegable. El 13 de octubre de 1936 el P. Miguel bendijo la capilla dedicada a la Virgen del Rosario, en Puerto Londero. El 30 de agosto de 1937 bendijo la capilla en honor a Santa Rosa, en Itacaruaré. El 2 de diciembre de 1937 se ofreció la primera función de cine para todo público y gratuita. Fue en preparación a la fiesta patronal, cuyo novenario dirigió el P. Jorge Kemerer. El P. Miguel animó a la comunidad creando una biblioteca y lugares de sano esparcimiento familiar. Dedicó tiempo y entusiasmo en la formación de asociaciones: Acción Católica, Comisión Pro Templo e Hijas de María. Desde San Javier se atendió hasta Monteagudo, en el Alto Uruguay. Gracias a una lancha a motor se visitaban pueblitos y colonias.

La misión requiere más obreros

En diciembre de 1937 llega como ayudante el P. José León Thiel, quien en 1939 asume como párroco, cuando el P. Miguel es trasladado al Seminario de Salta, entonces atendido por los Verbitas. Como ayudante llega a San Javier el P. Bernardo Grauthoff. El P. León se empeñó en construir lo que es el actual templo. No podemos omitir la acción decidida del laicado que apoyó esta iniciativa. En el año 1942, trasladado el P. Bernardo, llegan como colaboradores el P. Luis Stass y luego el P. Luis Lechman, quien reemplazó al P. León que fue trasladado al Alto Paraná y de allí a Buenos Aires. En marzo de 1943, San Javier recibió al nuevo párroco, P. Clemente Heggener, quien concluyó la obra iniciada por el P. León.

FUENTE: Misioneros del Verbo Divino.
Ver Más

Etiquetas
Período:   Territorio Nacional de Misiones 1881-1953
Uso:   Culto
Otros:   Protegidas